Antiinflamatorio. Astringente. Cicatrizante.
El almendro, Prunus amygdalus o también Prunus dlucis, es un árbol nativo de Europa del Este y el sur de Asia. Se trata de un árbol frutal el cual es muy conocido y apreciado por su fruto, la almendra, aunque también son ampliamente conocidas sus propiedades medicinales.
El almendro es un árbol de gran altura, pudiendo alcanzar hasta los 10 metros, aunque en la mayoría de los casos rondará entre los 4 y 5 metros. El tronco es delgado en comparación a su altura, pudiendo alcanzar hasta 30 centímetros. La corteza es rugosa y posee numerosas grietas.
Es un árbol que da una gran cantidad de ramas, cuando son tiernas son de color verde, pero al paso de un año se tornan de color gris. Posee hojas en forma abundante, cada una de ellas alcanzando hasta 10 centímetros de largo.
La flor del almendro es de un color rosa pálido, casi blanco, alcanza diámetros de entre 3 y centímetros. La floración se da a principios de la primavera, brotando éstas antes que las hojas. El fruto tarda mucho en madurar, de entre 7 y 8 meses, por lo que este se colecta hasta mediados del otoño.
Las partes de interés principal es la semilla, la cual es la parte que solemos llamar almendra. Esta se suele usar en la cocina, para fines cosméticos y también medicinales.
Propiedades terapéuticas
La almendra es ampliamente conocida como remedio para la tos. Al extraer el jugo de ésta se puede obtener un jarabe ideal para irritaciones del tracto digestivo así como para vías urinarias.
Por otro lado el aceite de la almendra ha ganado mucha popularidad para el tratamiento de la piel, desde productos para mejorar la tersura hasta pomadas para el tratamiento de quemaduras, dermatitis, pieles secas, entre otros problemas.
También se puede emplear el aceite como antiespasmódico, sin embargo, este uso deberá ser bajo estricta supervisión médica debido al riesgo de intoxicación que se puede tener al consumir el aceite.
La almendra es un excelente alimento gracias a su aporte alto en fibra dietética, que ayuda a mejorar la digestión; vitamina E, que cumple importantes funciones en el organismo, además de ser un excelente antioxidante; junto con una rica y variada cantidad de aminoácidos.
Investigación sobre la almendra
Aunque aún falta evidencia que lo corrobore, existen diversos estudios que señalan que el consumo de almendra podría reducir el riesgo a desarrollar el cáncer. También se estudia la posibilidad de ayudar a reducir el colesterol circulante al incrementar los niveles de proteínas de alta densidad (HDL).
Modo de uso
- Leche de almendras. Se emplea una taza de almendras sin tostar, las cuales deberán macerarse en medio litro de agua durante 10 horas. Después se machacan hasta obtener una pasta fina. Finalmente se mezcla con 1 litro de leche, se cuela la mezcla y se puede emplear.
- Mascarilla de belleza. Primero se debe obtener un polvo de almendras, que se hará moliendo almendras hasta obtener un polvo fino. Después se añade limón y se crea una pasta la cual deberá usarse como mascarilla. Ideal para el tratamiento de piel grasa.
- Culinario. Existen una gran cantidad de recetas las cuales podemos preparar para incorporar almendras en nuestra dieta diaria.